La atención es clave en los procesos de enseñanza y aprendizaje: solo cuando logramos mantenerla somos capaces de aprender. Pero la atención también implica desatención, pues prestársela a algo nos impide atender a otras cosas. En la economía de la atención, toda una industria trabaja en captar y mantener la nuestra para comerciar con ella. Nuestro tiempo y nuestra atención son la mercancía. En esta jornada buscaremos profundizar en los mecanismos y tecnologías que hoy en día capturan nuestra atención, ponerlos en diálogo con el mundo de la escuela y de la educación y reflexionar sobre cómo deben actuar los maestros y maestras en un contexto como el actual en el que todo conspira por distraer nuestra atención.