Desde que la Administración Biden iniciase su andadura se hizo patente que el nuevo inquilino de la Casa Blanca quería incidir en los diversos escenarios geopolíticos. Y hacerlo para recobrar posiciones que habrán quedado desatendidas en la presidencia anterior y también para devolver al multilateralismo algunas esperanzas.
Ahora, cuando los procesos de vacunación generalizada en las sociedades avanzadas hacen presentir recuperaciones económicas y que faciliten el desarrollo de nuevas normalidades sociales que se atisban, conviene analizar cuáles son las nuevas tendencias geopolíticas que se aprecian.
Y hacerlo yendo más allá de los primeros apuntes fiscales que se han esbozado en la reciente reunión del G7 y de las delicadas situaciones que se viven en diversas latitudes del Planeta. Pues las distintas dinámicas que convergen en todas ellas obligan a ir más allá de lo inmediato. Para tratar de ver cuáles son los ejes permanentes de aquellas tendencias más relevantes y que conformaran el mañana global.